miércoles, 12 de agosto de 2009

Algo contigo

Este blog está parado, expectante, tranquilo.
Está esperando que lleguen palabras que puedan ayudarme a expresar todo lo que siento.
Que me crea todo lo bueno que me está pasando. Que me estalle el pecho.

Necesita, como yo, asimilar que no se me van a escapar volando tus besos.
Que tus manos están ahí para acariciarme siempre que quiera, y para sujetarme cuando me caiga.
Que tu cuerpo seguirá abrazándose al mío cada día...y cada noche.

Este blog, como yo, necesita asentar el hecho de que alguien piensa en mí cada día, y que yo pienso en ti cada momento.

Supongo que este blog, como yo, no está acostumbrado a que me quieran como tú lo haces. Ni a que las cosas me salgan del todo bien.

Por eso este blog está parado, expectante, tranquilo.
Porque no sabe qué decir, ni quiere decir nada más.
Porque lo único que quiere es disfrutar de todo esto.
De tu sonrisa. De que me mires cuando creas que no te veo. De que me cuides. De me roces. De que me hables. De que me abraces. De que me hagas reír. De que me toques. De todo lo que me dices. De todo lo que me demuestras.
De que me quieras. De quererte. De ti